Estos últimos semestres ¿tomaste más en serio tu estabilidad financiera?
Si tu respuesta es sí, es que aprendiste una de las lecciones más importantes del año pandémico.
Desempleo, cierres, clausuras, industrias y economías mundiales pendiendo de un hilo…
Llevó a que muchos se cuestionaran cómo estaban encaminando sus finanzas, y más importante que esto: su capital.
Hoy en día las modas y tendencias económicas que expanden todo horizonte posible de inversión, pueden llegar a ser alternativas de crecimiento financiero rápido, pero al mismo tiempo tienen una estructura frágil y ante los ojos de algunos escépticos son ‘dudosas’.
Tal es el caso de la inversión en las criptomonedas, un mercado relativamente nuevo, de crecimiento exponencial, pero con muchas disyuntivas sobre sus cimientos y con una volatilidad característica donde un simple ‘tuit’ puede depreciar por completo el valor de una criptomoneda. Y es así como una inversión de tu capital, que viste crecer durante un par de años, en un abrir y cerrar de ojos, se desploma.
Es importante decir que, mantener una salud financiera estable, no limita a experimentar nuevos mercados, pero sí invita a usar tu capital de forma más inteligente.
Tomar todos tus huevos y echarlos sobre un mismo canasto, nunca ha sido una buena idea y lo sabemos todos. Sin embargo, invertir capitales fuertes sobre los mercados financieros más seguros, nunca ha dejado de ser una decisión inteligente.
Es por eso que nos atrevemos a decir -tomando en cuenta ya las lecciones aprendidas- que el mundo inmobiliario es el futuro financiero. ¿Por qué?
- Respaldo Financiero
La seguridad y flexibilidad que te da la adquisición de un inmueble, simplemente es una acción que protegerá tus finanzas en caso de una emergencia económica o personal. Además, un bien inmueble está considerado como una garantía financiera en caso de requerir un crédito, una hipoteca o para utilizarla más adelante cuando te jubiles.
- Factor humano.
Al adquirir un bien inmueble, es un apoyo directo a la economía y estabilidad local. No sólo es una propiedad, si no que te vuelves partícipe en una cadena de trabajo donde se ven involucrados todos los prestadores de servicios que hicieron posible el proyecto donde hayas invertido.
- Retorno de inversión elevado.
El retorno se calcula según las condiciones en las que se efectuó la compra, la plusvalía que haya en la zona y el dinero que la propiedad reciba al momento de venderla, que suele incrementarse bastante con el paso del tiempo.
Mientras tú mantienes trabajando tu dinero, la propiedad que adquiriste con el tiempo crece su valor. Esto, claro está, se determina dependiendo de distintos factores como la zona en donde se encuentre el inmueble, el flujo comercial, los precios de las propiedades cercanas, etc.
Si nos ponemos a pensar un lugar que cumpla con estas 3 características, es inevitable considerar a Mérida, Yucatán como un gran activo para la inversión inmobiliaria.
Sabías que…
“Mérida es una de las pocas ciudades que aceleraron su crecimiento respecto a la década anterior (1.9% anual), lo cual en gran parte se dio como resultado de una alta y atípica migración; pues con 80,000 nuevos residentes, Mérida es la octava ciudad del país que más personas recibió de otros estados durante el último quinquenio.” Fuente: Inmobiliare
Inevitablemente todo esto ha convertido a Mérida un foco para la inversión tanto pública como privada. En el mapa que se muestra a continuación, nos podemos dar una idea de la distribución NSE dentro de esta característica ciudad, así como el desarrollo de inversión privada donde muestra que 14 de los 16 Centros Comerciales que existen, se encuentran al norte de esta ciudad.
Esto convierte automáticamente al Norte de Mérida en un lugar de alta plusvalía y oferta en la inversión inmobiliaria.
Hoy en día las inversiones inmobiliarias en este estado van más allá del aspecto residencial, ya que con el crecimiento del Estado en los últimos 10 años, las oportunidades de inversión latentes se encuentran ya en el sector industrial, corporativo y comercial.
Es por eso que no hay que pasar por alto la oferta de oficinas, corporativos, consultorios médicos, locales comerciales, etc; que traen consigo proyectos como los son The Sky (Rascacielos), SkyWork (Hotel Business Class + Oficinas), SkyPark (Parque Industrial), entre otros.
El que Mérida prontamente sea testigo de su primer rascacielos, indica un antes y un después en esta ciudad, que hoy por hoy, es el paraíso de la inversión inmobiliaria.
